Un maravilloso viaje en el tiempo.
Una horda de osos iluminados avanza acompañado de extravagantes bailarinas, todos guiados por un seductor maestro de ceremonias sobre zancos.
De ciudad en ciudad, forasteros sin fronteras, viajan con su espectáculo en bandolera.
Una extraña caravana entra en las calles, de la misma manera en que, como a principios de siglo, se cruzaban en nuestras plazas publicas: pregoneros, « buhoneros », saltimbanquis y domadores de osos… Gigantes fascinantes, nos traen asombro y ensueño ofreciéndonos inesperadamente una danza delicada.
Un elegante ballet, un encuentro único e improbable.
Los artistas vienen de Francia